Se muestra por completo después de 300 años ‘La ronda de la noche'

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Foto: El Confidencial

El cuadro más famoso de Rembrandt se exhibe en el Rijksmuseum de Ámsterdam, pinacoteca especializada en arte neerlandés. 

A pesar de que la obra figura en los libros de historia del arte como ‘La ronda de noche’, el cuadro tiene un título original más acorde con la relevancia del encargo recibido por el pintor. Se llama ‘La compañía militar del capitán Frans Banninck Cocq y el teniente Willem van Ruytenburch’, que formaban parte de una compañía de arcabuceros de Ámsterdam. El capitán viste de negro con una banda roja. Su teniente va de amarillo, con plumas en el sombrero y botas de piel clara. En realidad, iban a cumplir su misión de día, pero las sombras nocturnas se deben al barniz utilizado, oscurecido con el tiempo. Este tipo de retratos de grupo era muy popular en el siglo XVII.

Pero a pesar de su relevancia para el mundo del arte y la historia holandesa, esta obra ha pasado por situaciones de vandalismo, usurpación y mutilación. Cuando las tropas napoleónicas ocuparon los Países Bajos y Napoleón coronó a su hermano Luis como rey de Holanda en 1806, el Ayuntamiento se convirtió en Palacio Real y los magistrados municipales trasladaron el cuadro a la casa de la familia Trip (Trippenhuis), inmediatamente, Napoleón ordenó su vuelta a palacio y se mantuvo allí hasta la caída del Imperio Napoleónico. Luego la obra volvió a la Trippenhuis ya convertida en el Rijksmuseum, como Galería Nacional de Arte de los Países Bajos.

En 1715, la obra fue dividida en cuatro porciones porque no pasaba por la puerta de la sala que se le había adjudicado en el Ayuntamiento de la ciudad, y una parte se perdió. Aparte de esta mutilación ha sido objeto de algunos ataques vandálicos. En 1975, un hombre atacó la obra con un cuchillo haciéndole numerosos cortes. ​ El lienzo fue restaurado con éxito. Luego en 1985, un visitante del museo roció la pintura con un spray de ácido que llevaba oculto, los guardias actuaron rápidamente y salvaron el lienzo, de nuevo fue restaurada por completo.

El pasado miércoles 23 de junio la obra fue exhibida en su totalidad, por primera vez en 300 años con ayuda de la inteligencia artificial. Durante los dos últimos años, ha sido sometido a un riguroso estudio de fotografía de alta resolución con imágenes en 3D, escaneado con rayos fluorescentes con el fin de llegar a todas las capas de pintura sin dañarlo. No es solo el mayor estudio realizado hasta la fecha, sino que los datos recogidos servirán también al mejoramiento de la restauración, prevista para septiembre. Valía la pena hacer algo más: intentar la reconstrucción del trozo de tela cortado hace tres siglos aplicando la inteligencia artificial.

El museo Rijksmuseum, inició una investigación sobre el trozo de la tela desaparecido y gracias a una pequeña copia del siglo XVII, atribuida al pintor holandés Gerrit Lundens, se realizó una reproducción. Esa labor fue hecha por Robert Erdmann, especialista en patrimonio cultural y científico sénior del museo quien mencionó que hicieron una mezcla de la copia con el cuadro original “hasta lograr una imagen de lo que pensamos que habría hecho el artista”.

El resultado, a tamaño natural, podrá verse durante tres meses y cambia la lectura del óleo porque los dos personales principales, capitán y teniente de una milicia cívica, ya no están en el centro del encuadre.

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