Regresó el villano querido en ‘Venom: Carnage liberado’

Desde hace un par de semanas en la plataforma de Netflix podemos disfrutar de la primera entrega de Venom, se mantiene en entre las 10 más vistas, además, su continuación es de las taquilleras desde su estreno. 

En ‘Venom: Carnage liberado’ seguimos la continuidad de la historia, basta ver la escena pos créditos en la que Eddie Brock (Tom Hardy) entra a la prisión para entrevistar al asesino serial Cletus Kasady (Woody Harrelson), ya que mencionamos los pos créditos, es muy importante esperarlos en esta segunda entrega, así que si usted es de los que sale rápido de la sala de cine o va con alguien que corre al final de las cintas, adviértale que es vital quedarse hasta el fin. 

Después de las advertencias regresamos a esta historia en la que conocemos un nuevo simbionte, hijo de Venom, de color rojo que son más poderosos a los tradicionales. 

No hay grandes cambios, es más, sentimos que debió ser más arriesgada esta entrega, ya que en la primera, las críticas cuestionaban la profundidad de la historia, la ligereza continua, pero el humor y la relación entre Venom y Eddie es más profunda y con más humor. 

El prestigioso periodista decidió dedicarse a la presa escrita y su gran noticia es poder hablar con Cletus, un asesino serial sin matices, bueno con uno, el amor, desde muy pequeño ese sentimiento lo despierta Frances Barrison, una villana con poderes sónicos. Ellos desde su adolescencia están separados, su comunicación se da gracias a la prensa. 

Es más, sabemos que son malos, pero faltó profundizar un poco en el porqué de su maldad, es cierto que estamos ante una propuesta de entretenimiento puro, pero se pudo profundizar un poco más.

Ya que Cletus, un ser despreciable y maligno, es un ser enamorado, nos recuerda a su gran éxito de los 90 dirigido por Oliver Stone, Natural Born Killers (Asesinos por naturaleza), una pareja de los locos enamorados que asesinan con una crueldad sorprendente, aquí su simbionte comparte esa sed de sangre.

Lo mejor del largometraje es la particular relación entre Eddie y Venom, esa transformación de los dos en la que síbrillan los matices, Venom un ser poderoso, hambriento, muestra sus dotes de periodista y una gran simpatía por el planeta y sus habitantes, además de empático. Mientras que Eddie no teme ser un perdedor ya no es un arrogante que piensa ser el mejor, el amor sigue marcando su destino al igual que ayudar a los demás. 

Venom 2 es un divertimento con mucha acción, humor y que parece ser una cinta de conexión o podemos ser más duros y calificarla como de trámite, pero sería demasiado castigo a una cinta que divierte, eso sí, parece que lo mejor está por venir y eso sí, lo esperamos con muchas ansias.