Muertos y desplazados en la provincia sudanesa de Kordofán del Sur

En un informe difundido por la Oficina para la Coordinación de Asuntos Humanitarios de la ONU en Jartum, se señala que "unas 60.000 personas han huido y que otras muchas se esconden en las montañas" por la violencia en esa provincia limítrofe entre el norte y el sur de Sudán.

La agencia de la ONU subraya que "hay informaciones de asesinatos de carácter étnico que tienen como objetivo personas pertenecientes a diferentes grupos" y apunta que también hay saqueos de bienes que impiden el retorno de los habitantes a las aldeas.

"Existe una creciente percepción de que hay un temor entre algunos desplazados que se encontraron cercados por la violencia continua y los planes de división étnica", advierte la OCHA.

Responsables de los partidos gobernantes en el norte y el sur se han acusado mutuamente de haber comenzado los combates en este estado. El Movimiento Popular de Liberación de Sudán, que gobierna en el sur, ha acusado al Ejército del norte de encender la chispa del conflicto en Kordofan del Sur cuando intentó desarmar a esos milicianos, la mayoría pertenecientes a la zona de la montañas de Nuba.

Por su parte, el Ejército norteño acusó a grupos armados aliados del sur de provocar los choques. El Congreso Nacional del Pueblo, el partido gobernante en el norte, advirtió apoyar lo que califica de "rebelión" en Kordofán del Sur.

Kordofan del Sur es la única provincia del norte de Sudán que posee yacimientos de petróleo.