El Folclor se toma la Feria

El maestro, porque no merece menos, Justo Valdéz gran representante de la cultura Palenque capturó con su energía a los asistentes de este gran evento. Un delicioso sonido de la tambora, una voz con sabor y una brillante actitud, logró atrapar a más de uno, hecho que se evidenció con el alegre movimiento de sus cuerpos; hasta los niños se contagiaron.

Impecables trajes blancos, una tarima con buen montaje y sonido y un sol que favoreció esta efusividad, son factores que definitivamente complementaron la presentación musical de este personaje junto con otros palenqueros, que le acompañaron imprimiendo su sentido de pertenencia cultural en cada instrumento  encargado de visibilizar la historia de esta población.

Fue un espacio propicio para demostrar que en nuestro país los conocimientos valiosos se desechan en la mayoría de las oportunidades, que existen un sinnúmero de contextos culturales que desconocemos, y eso sí, para reiterar que el sabor de la auténtica comida cartagenera debe ser un orgullo de la patria.

Entre aplausos, discursos coloquiales pero enriquecedores, un entorno saturado de buena vibra como se diría y una invitación para conocer, reconocer y por qué no, aprender la lengua palenquera cerró su presentación el señor y maestro Justo Valdés junto a los músicos que le acompañaban.