MinSalud no ha entregado informe oficial sobre la eficacia de Coronapp

Días después de iniciar la pandemia por el Covid-19 en Colombia, el Ministerio de Salud lanzó la aplicación ‘Coronapp’ con el propósito de informar a la ciudadanía sobre las nuevas medidas, evaluar el estado de salud de las personas, hacer un rastreo de contagios y dar recomendaciones. Sin embargo, con el paso del tiempo se requirió para ingresar a algunos espacios y hasta para trasladarse en el país. Ahora, dos años después la herramienta fue eliminada y se desconoce el balance oficial de su uso. 

La Fundación Karisma hizo varias advertencias sobre la plataforma y su utilidad, y continúa al tanto de lo que pasará con la información de esta. LAUD 90.4 FM ESTÉREO dialogó con la directora Carolina Botero.

“La app tenía varios propósitos, entre ellos estaba hacer seguimiento de síntomas y establecer la ruta de atención, además realizar rastreo de contactos de manera digital, función que fue cuestionada por poner en riesgo la privacidad”, dijo. 

El propósito inicial de la estrategia fue interesante, pero hubo fallas en la implementación, razón por la cual la Fundación expuso sus preocupaciones

• La brecha digital: “Se afirmaba que la herramienta iba a servir, pero nos preguntamos para qué población, no todas las personas tenían un smartphone para descargarla; si un derecho depende de esto cómo se va a remediar la brecha”, señaló.

• No la declararon obligatoria, pero la exigían para ingresar a algunos espacios como por ejemplo los aeropuertos. 

• Tuvo problemas de seguridad digital.

• No se entregaron estadísticas de uso.

• No hubo evaluación de su utilidad: “A estas alturas no tenemos un reporte de evaluación de la app, oficialmente no sabemos qué pasó”, exhortó.

Botero indicó que aplicaciones similares que se desarrollaron en el mundo respetaron los DDHH, separaron sus funciones y evaluaron la repercusión social, partiendo de ello se hacían ajustes, en cambio en Colombia hubo “ensayo – error…no hubo análisis del impacto de Derechos Humanos, ni de la estructura de información y de política, y no les preguntaron a los técnicos sobre qué era lo más conveniente”, enfatizó.

Otra de las preocupaciones es ¿Qué ocurrió con los datos de las personas? La invitada aclaró que es diferente que un privado tenga la base de información de un ciudadano donde este tiene que firmar un consentimiento, a que sea el Estado el que la obtenga.

La directora comunicó que al respecto la Fundación entregará un informe para solicitar al Ministerio de Salud el balance del uso de la app. 

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